El Teatro Paraíso llega al Teatro de la Comedia de Madrid el próximo 29 de diciembre. La sede de la Compañía Nacional de Teatro Clásico se abre a "Pulgarcito", la versión del cuento clásico de Charles Perrault que dirige Iñaki Rikarte. El montaje cuenta con la música de Iñaki Salvador y el reparto lo integran Tomás Fernández, Aitor Fernandino, Ramón Monje y Peio Arnáez.
En "Pulgarcito" la familia sufre grandes privaciones porque la conforman siete niños demasiado pequeños para trabajar. En épocas de hambruna, la única solución era deshacerse de esas pequeñas personas improductivas. Pulgarcito y sus hermanos no son abandonados en el bosque por el odio de una madrastra, son sus padres quienes deciden hacerlo. Durante los siglos XVI y XVII, muchos niños eran abandonados porque sus padres no podían mantenerlos.
Los orígenes del cuento original al que Perrault dio su forma clásica se han perdido, pero el relato ha seguido vigente generación tras generación. Ahora, el dramaturgo y director Iñaki Rikarte "recoge las migas de pan" de la historia y sitúa ésta en un escenario actual. De esta manera, el "Pulgarcito" que se estrena en el Teatro de la Comedia en el marco del ciclo "Mi Primer Clásico", contiene el texto de Perrault pero lo sitúa en una situación nueva, que permite dibujar nuevos senderos.
Iñaki Rikarte, en el texto de presentación de la obra, explica que "Quien busque el Pulgarcito de Perrault hallará lo que busca, como también lo hará quien desee encontrar una visión nueva y estimulante. Divertido para los niños y conmovedor para los adultos (aunque tal vez resulte lo contrario), presentamos el cuento a través de la relación de un hijo con su padre. Y es por eso por lo que éste es un espectáculo especialmente ideado para padres e hijos. Según se dice, los cuentos se inventaron para dormir a los niños y despertar a los adultos, pero ¿y si los padres fuesen los niños y los hijos los adultos?".
"Pulgarcito" podrá verse en el Teatro de la Comedia desde el 29 de diciembre y hasta el 3 de enero de 2016. El montaje cuenta con la escenografía y el vestuario de Ikerne Giménez y la iluminación de Esteban Salazar. Es un espectáculo subvencionado por el INAEM, el Gobierno Vasco y el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz.
