El Teatro Romano de Cádiz sigue cerrado, y suma ya dos años así. Pero los vecinos y comerciantes de la zona han decidido no aguantar más y han creado una plataforma para reclamar a Cultura la reapertura del yacimiento. Cuando cerró sus puertas a mediados de 2010, figuraba en las estadísticas de la Junta de Andalucía como uno de los monumentos más visitados de la provincia de Cádiz.
Ni un sólo visitante ha podido conocer el monumento, perteneciente al yacimiento arqueológico de Gades, desde que hace 24 meses se cerraran sus puertas para llevar a cabo unas obras de consolidación, proyectadas por el arquitecto Emilio Yanes. Las labores de excavación e interpretación del enclave, la explotación turística del mismo y la habitación de los edificios próximos conformaban un contexto problemático que obligaba a un intervención.
Pero las obras están paradas desde 2011 por falta de fondos. A comienzos de 2012 también se paralizó la musealización del yacimiento: un proyecto para que los visitantes pudieran conocer el monumento a través de unas grandes cristaleras desde un centro de recepción. La empresa que tenía que llevarlo a cabo cerró. El Teatro Romano de Cádiz, el segundo más grande del mundo, es desde entonces una escombrera.
Cultura ha señalado que en el Teatro Romano se ha llevado a cabo ya una inversión de 1,3 millones de euros, y que para finalizar la primera fase prevista solamente resta un montante de 200.000 euros, que llegarán pronto. Además, afirma, la llegada de fondos europeos permitirá terminar las obras del centro de recepción e interpretación. Los vecinos afirman que, si no hay dinero para terminar las obras, al menos retiren los escombros y el Teatro se abra tal y como estaba antes.
