Enrique Salaberría es uno de los empresarios de teatro más importante de España. Lidera Grupo Smedia desde hace 19 años. Una de las principales empresas privadas que gestiona teatros en Madrid y también una de las principales de España, con una trayectoria de prolongado e intenso trabajo dedicado a la producción, realización y distribución de obras de teatro y espectáculos de primer nivel.
Una entrevista de Juanjo García.
Teatro a Teatro: Retomando la entrevista que te hicimos hace unos años, una de las intenciones que teníais era salir de Madrid. ¿Habéis podido hacer algo al respecto?
Enrique Salaberría: Evidentemente hemos hecho cosas. Hemos salido a Zamora. Gestionamos el Teatro Ramos Carrión de Zamora ya desde hace dos años y vamos para el tercero. Y hemos trasladado también nuestra capacidad de trabajo a Sevilla al Cartuja Center. Un espacio de 2.000 localidades sentadas y hasta 4.500 localidades para conciertos en lo que sería pista plana. Seguimos desarrollando y trabajando este proyecto de estar fuera de Madrid. Y la verdad es que, aunque es complejo, nos mueve la ilusión de poder desarrollarlo.
Teatro a Teatro: Tengo la impresión de que con el paso de los meses, el cambio de programación del que hablamos va simplemente hacia una apertura al mayor número de espectáculos posibles. ¿Esto es correcto?
Enrique Salaberría: La multiprogramación tiene un principio. El teatro privado, como tú bien sabes, no goza del entendimiento desde la administración pública. Se nos considera un obstáculo para la cultura del entretenimiento, para el ocio del entretenimiento que es lo que somos. Se nos considera un obstáculo para el adoctrinamiento cultural. Por lo tanto no somos bien recibidos por la administración pública.
Ello nos obliga a obtener y a optimizar las 24 horas del día qué tiene el teatro. Y el modelo de programación sí que cumple con una elección y con unos criterios de estilo. Pero es cierto que cumple con una visión dentro de ese abanico de estilo. También en los horarios en el que el público va. Y qué tipo de público o qué tipo de audiencia tiene capacidad para asistir en un horario de 5 a 6 de la tarde, de 8:30 o de 11. Por lo tanto el modelo está unido al abanico de horarios. Y está unido a los criterios estéticos.
Teatro a Teatro: Dentro de esas líneas de programación… ¿Los monólogos son cada vez más importantes? ¿Los infantiles tienen cada vez más presencia? ¿Qué pasa con el Teatro Infanta Isabel?
Enrique Salaberría: El teatro familiar infantil en este caso es muy importante. Son las nuevas audiencias y tengo decir que si alguien trabaja el modelo de ocio familiar, sin duda, es el teatro privado. No cabe duda que nos desgañitamos para atender la gran demanda que existe por el ocio, por el ocio cultural, familiar, de estas características.
Los monólogos nocturnos son muy importantes para el público, digamos, más adolescente y más joven. El público quiere pasárselo bien, quiere divertirse. Bastantes líos tiene con sus exámenes, sus estudios o su trabajo. El público quiere divertirse y el público más joven, que hasta ahora no se acercaba, estamos consiguiendo que se acerquen a través de los monólogos. Por lo tanto, se trata de renovar el público. Y esta renovación es lo único que nos mueve. Porque es lo único que va a hacer que perdure el teatro en el tiempo.
Con el Teatro Infanta Isabel no pasa nada. Ahí sigue. Está en el mercado. Hemos considerado, qué bueno, que la propiedad del teatro y sus exigencias y su forma de ver el teatro, no es la nuestra. No era la misma línea de trabajo. Y yo creo que ha sido muy respetuosa la propiedad, en este caso. No era cuestión de continuar.
Teatro a Teatro: En este tiempo, desde la anterior entrevista, se ha ganado la batalla del IVA cultural, con el ajuste a favor. ¿Está el tema resuelto? ¿Cómo os afectó? ¿Bajasteis los precios? ¿Se tradujo en más espectadores?
Enrique Salaberría: El tema del IVA cultural no está resuelto. El IVA cultural sigue estando al 10%. Partimos de un IVA del 7%, ya alto en su momento y que impide el crecimiento de la industria. Sobre todo en una industria donde el riesgo es brutal. El riesgo nuestro es brutal y no justifica un IVA de esas características cuando nuestro servicio es un servicio público. Y es un servicio de ocio. Un servicio cultural.
Creo que Madrid no sería Madrid, sin duda, sin el teatro privado. Porque no tendría los musicales. Y no tendría el teatro de éxito que hace que la gente peregrine a la ciudad para disfrutar de los espectáculos. ¿Qué provocó el IVA? El IVA prácticamente ha hecho desaparecer un porcentaje altísimo del sector. Estamos hablando de un 40% del sector que ha muerto. Estamos hablando de una pobreza generalizada en sus miembros. En los actores, en los creadores…
Desde luego una cuestión que ha provocado el IVA es el empobrecimiento en la inversión y el empobrecimiento de los sueldos de todos sus trabajadores. Recuperar esto, en este momento, después de la crisis, en que no ha habido aumento de sueldos, en la que la gente no tiene en el bolsillo más dinero. Porque evidentemente el estado se lo lleva en impuestos porque aquí nadie rebaja el gasto. Estamos en una situación, yo diría que precaria. Donde nos tenemos que mover con mucha diligencia porque de lo contrario la situación se va a volver a complicar y mucho.
Teatro a Teatro: Hablando con Bet Orfila, la presidenta de ADETCA, la asociación de empresarios teatrales catalanes, tengo la impresión de que ellos están muy unidos. ¿Cómo están los empresarios madrileños de unidos? ¿Se está haciendo una política de apoyos entre colegas de profesión?
Enrique Salaberría: Los empresarios de Madrid estamos muy unidos. Creo que no solamente estamos muy unidos sino que tenemos claro el proyecto cultural de la ciudad. Somos una parte muy importante de lo que ocurre en la ciudad, del turismo cultural que nos acompaña y sabemos que somos la ciudad en el mundo de habla de español más importante en producción, número de espectáculos y número de espectadores.
Si la unión de los empresarios y la convivencia de los empresarios es para justamente lo contrario, la verdad, es que no tiene mucho interés. Y el modelo madrileño demuestra que es más interesante que el catalán, sin duda.
Teatro a Teatro: ¿Ha cambiado tu criterio respecto al teatro público actual? ¿Qué hay que seguir cambiando para estructurar mejor la separación entre teatro público y teatro privado?
Enrique Salaberría: Yo opino que la idea de teatro público y teatro privado es realmente muy perversa. El teatro es teatro. El teatro es ocio. Y el público va a disfrutar de la escena. Y si la escena aburre, te garantizo que es lo más aburrido y lo más desastroso que hay. Ese señor no volverá o esa señora no volverá en su vida. Es la perversidad de lo público y lo privado. Y de las subvenciones encubiertas, qué es en lo que termina.
A mí me parece realmente patético, para que te voy a engañar, me parece patético. Yo creo que el modelo de teatro público es necesario en todo lo que significa investigación y desarrollo. Y creo que todo lo que significa dirigirse al público para que el público disfrute de un ocio cultural… lo que no hay que hacer es encubrirlo con subvenciones escondidas. Y lo que hay que hacer, si se quiere ayudar al sector, es ayudar al sector. Eso es lo que opino.
Teatro a Teatro: Smedia apostó por su propio sistema de ticketing y nos gustaría que nos dijeras cuál ha sido el balance que hacéis.
Enrique Salaberría: Respecto al sistema de ticketing, buscábamos un sistema que aglutinase todos los principios de administración que nosotros consideramos desde el punto de vista de módulos contables y desde el punto de vista de módulos de gestión. Un sistema que nos permitiese desarrollar estrategias acercándonos a nuestros usuarios. Y, sobre todo, mejorando los ratios de tiempo que dedicamos al modelo administrativo. Por lo tanto, si algo tengo que decir del sistema, es que nos ha ayudado a crecer y nos ha ayudado a crear un modelo de administración y acercamiento a nuestras audiencias muy positivo y saludable. Sin duda, el balance es muy positivo.
Teatro a Teatro: Enrique, nos gustaría saber qué opinas del proyecto Chivatos de FAETEDA?
Enrique Salaberría: En lo referente a lo que se llaman chivatos… ya la palabra chivato, de por sí, no es muy ilustrativa. Entonces, cuando algo se mueve en el entorno de ese concepto, a mí me genera mucha desconfianza. Y me genera mucha desconfianza. Esta pregunta la considero innecesaria. Creo que el sector tiene muchos sistemas para conocer cómo funciona. Y creo que tiene muchos problemas para solucionar antes que andarse contando chismes.
Teatro a Teatro: Muchas gracias por hacernos un hueco en tu apretada agenda.
Enrique Salaberría: Gracias a vosotros.