La XXXV edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro, que arranca el jueves 5 de julio, incluirá siete representaciones accesibles para personas con discapacidad auditiva y ceguera. Un sistema de apoyo subtitulado y otro de audiodescripción han sido las herramientas elegidas para permitir que personas con este tipo de discapacidad también disfruten del Festival.
Una pantalla en el escenario recogerá no sólo la proyección de los diálogos subtitulados, sino también los elementos sonoros de la ambientación o la música para que las personas sordas no pierdan detalle de la representación. Las personas con ceguera, por su parte, recibirán un receptor por medio del cual irán recibiendo una descripción detallada de todo cuanto ocurra en escena.
Estas ‘representaciones accesibles’ se repartirán a lo largo de siete sesiones, y en cuatro obras distintas. Las dos primeras son "Fingido y verdadero", de Lope de Vega y producido por Teatro Cornucopia (13 y 14 de julio) y "La prueba de las promesas", de Juan Ruiz de Alarcón y a cargo de la Compañía Nacional de Teatro de México (21 y 22 de julio).
Los días 24 y 25 de julio, también serán accesibles las representaciones de "En la vida todo es verdad y todo es mentira", de Calderón de la Barca, en montaje de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y el día 28 de julio, las personas ciegas y sordas podrán disfrutar de la versión de "El Atolondrado" de Molière que ha preparado la compañía colombiana La Máquina de Molière.
La iniciativa para hacer accesible el Festival a personas sordas y ciegas se lleva a cabo bajo el lema "Disfruta de los clásicos accesibles", y es fruto de la colaboración entre la organización del Festival, la ONCE, la Fundación Vodafone y el Real Patronato de la Discapacidad, a través del Centro Español de Subtitulado y Audiodescripción.