Mario Gas deja hoy el Teatro Español después de ocho años al frente, con elegancia y sin "espinitas" clavadas a pesar de los "golpes bajos de muy mal gusto", o las "falsedades" sobre el supuesto "blindaje" de su contrato.
Tras un periodo “tranquilidad" le esperan proyectos "muy deseados" como dirigir a Miguel Ángel Solá y Daniel Freire en "El veneno del teatro", a Carmen Machi en "algo" que no quiere revelar aún, y alguna "otra cosa" en el Centro Dramático Nacional.
El pasado mes de marzo Mario Gas acordó con los responsables municipales dejar la dirección del Teatro Español, dependiente del Ayuntamiento de Madrid, el último día de este mes de julio. Tras la marcha de, Alicia Moreno, la delegada de las Artes del Ayuntamiento de Madrid, (acusada de "blindar" el contrato de Mario Gas), supo que pronto abandonaría la dirección del teatro: "Sin acritud, sin rencor, ni actitud de pérdida, a pesar de los golpes bajos".
Mario Gas ha confesado que se va “con una gran riqueza personal y vital, que no económica”, y que tampoco optará a ser director del Teatro Nacional de Catalunya, (planteado como un concurso, según el propio Mario Gas).
Ha definido su trabajo en este periodo con términos como “compañerismo” y “profesionalidad”, añadiendo que además hubo “camadería, alegría e incluso fricciones”. “Ha sido una época especial de mi vida, con cosas muy buenas en las que me he sentido realizado, al servicio del teatro y de la sociedad. Hemos hecho camino colectivo”, ha afirmado.
Mario Gas ha sido siempre defensor del teatro público, aclarando que no es enemigo de lo privado: “Hay que convivir y potenciar a la empresa privada que cree que con el arte se puede vivir”.
Y acabo diciendo "Me voy porque los actuales responsables del Consistorio creen que es bueno crear un equipo nuevo", calificando esta decisión de "lógica". "El nuevo equipo tiene aquí gente dispuesta a hablar, a entender que los tiempos cambian. Trabajaremos en el teatro sin rencor, malicia o malos rollos”.